Cuando sea vieja, vestiré de morado,
con un sombrero rojo que ni haga juego,
ni me quede bien,
y me gastaré el dinero de mi jubilación
en coñac y guantes de verano,
y sandalias de raso.
Y diré que no hay dinero para mantequilla.
Me sentaré en el pavimento
cuando esté cansada
y devoraré muestras de las tiendas
y oprimiré los botones de alarma
y rasparé con mi bastón los barandales de las calles.
Y compensaré la austeridad de mi lejana juventud.
Saldré a caminar bajo la lluvia en zapatillas,
y arrancaré flores de jardines ajenos
y aprenderé a escupir…
Pero, tal vez debiera practicar un poco todo eso desde ahora.
Así la gente que me conoce no se asombrará,
ni se escandalizará al ver que, de pronto,
soy vieja y me empiezo a vestir de morado.Jenny Joseph ( Birmingham, Inglaterra, 1932). Periodista y poeta.
viernes, 29 de febrero de 2008
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1 comentario:
Hola a todas: espero escribir esto en el lugar adecuado. ¿Como vais con el libro? Ya se que algunas lo han terminado y les ha gustado. Voy a intentar poner y un comentario.....
" Para algunos críticos la Niña Mala de las Travesuras... evoca a Emma Bovary, quizá a una Emma Bovary de nuestro tiempo, sin las mojigaterías burguesas del Ochocientos. ¿Es así? Vargas Llosa se muestra potente y vigoroso con esta novela, tanto que en ciertos pasajes y en determinados momentos nos recuerda al autor que empezara en 1963, con La ciudad y los perros, recuerda al autor de Conversación en La Catedral (1969) recuerda al autor de La Tía Julia el escribidor (1977) y recuerda al autor del Elogio de la Madrastra (1988) o Los cuadernos de don Rigoberto (1997). Esas ficciones autobiográficas le sirvieron a Vargas Llosa para recrear de otro modo y con otros materiales lo que era propiamente una experiencia personal"
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