Cuando sea vieja, vestiré de morado,
con un sombrero rojo que ni haga juego,
ni me quede bien,
y me gastaré el dinero de mi jubilación
en coñac y guantes de verano,
y sandalias de raso.
Y diré que no hay dinero para mantequilla.
Me sentaré en el pavimento
cuando esté cansada
y devoraré muestras de las tiendas
y oprimiré los botones de alarma
y rasparé con mi bastón los barandales de las calles.
Y compensaré la austeridad de mi lejana juventud.
Saldré a caminar bajo la lluvia en zapatillas,
y arrancaré flores de jardines ajenos
y aprenderé a escupir…
Pero, tal vez debiera practicar un poco todo eso desde ahora.
Así la gente que me conoce no se asombrará,
ni se escandalizará al ver que, de pronto,
soy vieja y me empiezo a vestir de morado.Jenny Joseph ( Birmingham, Inglaterra, 1932). Periodista y poeta.
martes, 26 de octubre de 2010
NUEVA LIBRERIA EN CÁCERES
No sé si lo habéis visto, pero está a punto de abrirse una nueva librería en Cáceres, en la esquina de la gasolinera de Mirat (donde antes había una tienda de congelados), que se llama Nobel. Me ha llamado la atención porque tiene un cartel que pone "Espacio Lector" (parece ser que es una cadena de librerías), que me ha sugerido que pueda tener algún apartado para hacer algo parecido a lo que comenta Marga en su entrada, o sea, tomarse un café mientras ojeas o lees algún libro (a lo mejor me equivoco...). Como tiene un cartel muy grande en el que pone libreriasnobel.es, he buscado en internet y os he puesto el enlace, para que curioseéis un poco. Es una franquicia, y tiene buena pinta. A lo mejor algunas ya la conocíais; yo no las había visto nunca.
Ojalá nos ofrezca nuevas opciones de ocio.
Y, por cierto, pasadlo genial en la cena y acordaos de mí, porque no puedo ir. Besos a todas.
domingo, 24 de octubre de 2010
Desde Guatemala
Hola a todas: estoy muy bien y feliz, todo esto es muy diferente, desde que hay ocho horas de diferencia, hasta el clima, cultura, comidas, violencia, situaciones, trabajo, etc
He descubierto a una cuadra del hotel
una maravillosa librería Sophos
donde se puede tomar un café mientras lees un libro,
escogí por azar, este libro: Demasiados recuerdos, de Annabella Giracca,
por leer algún escritor guatemalteco y mirad lo que he encontrado:
Asturias y Giracca: pasión y rabia por Guatemala
Asturias murió cuando la niñita Giracca aún no vestía minifalda (eso creo, al oír su vehemencia en el Palacio de la Cultura para no hacer folklorismo estético con los mayas y luego leer su prosa volcánica, iniciática).
Se parecen demasiado y no es exageración. Dos prosas fulminantes, ilustradas y populares, que aman como nadie esta tierra arrasada de violencia, como niños que lloran su país y regresan a los sonidos monótonos de las letanías, como un mantra o una oración en los brazos de una abuela que es el refugio en el holocausto final: ilógico, lógico, relógico..canta e ironiza Asturias; nada te turbe, nada te espante, todo se pasa…rememora y ora la Giracca.
Dos prosas fulminantes, ilustradas y populares, que aman como nadie esta tierra arrasada de violencia, como niños que lloran su país y regresan a los sonidos monótonos de las letanías.
La historia de Anabella Giracca de manera inevitable le recuerda a un chileno La casa de los Espíritus de Isabel Allende, novela de mujeres mágicas, de destinos trágicos, con el auge y caída de los sueños redentoristas, con la maldad encarnada, con hombres que son el deseo y la muerte. Pero la Giracca se aparta del realismo mágico, hay menos metáfora, la pluma no se atrapa en lirismo, se vuelve realista, por momentos brutal, en otros lárica, casi bucólica; una narrativa esquizofrénica, que no da tregua, que nos remite a todo claroscuro, que se permite combinar en el mismo párrafo erotismo con horror, la ternura del beso de la muerte.
En otra dimensión, son novelas neo costumbristas, sin criollismo banal. Ambos quieren contarnos los buenos tiempos y hacen desfilar algunos pequeños héroes, en medio del lodazal; sacristanes decentes, indígenas indomables, artistas soberbios, colonos alemanes que se liberan en el trabajo, mujeres que crean, vagabundos con mirada prístina, cocineras del último banquete posible, artistas circenses que huyen a un nuevo mundo, generales que creen en otro orden.
Por no hay escapatoria. El texto parece un epitafio sin salida. Asturias realizó un sarcasmo atroz con los que hacen como que hacen y no hacen nada, mostró la sofisticación y profundidad de las redes de corrupción, la hipocresía, la cobardía y crueldad del abuso de poder, la rescilencia para sobrevivir en la ciudad de los patios interiores. El libro que comenzó a escribir hace casi un siglo tiene la actualidad de una profecía auto-cumplida.
Anabella Giracca nos recuerda la historia que pervive o historia del tiempo presente; un fresco que está demasiado vigente, como si pintara un mural en el cielo arrebolado de Guatemala, un martes gris, de aguacero, de esos que hemos padecidos en este Continente, donde las cabezas cortadas de cuajo conviven con la sonrisa más bella del mundo refugiada en una indígena altiva que luce su huipil colorido, como lo quisiera la Giaconda para semi cubrirse con las flores del jardín imposible del cielo.
Novelas del amor y el extravío, de la pasión por la mater dolorosa que se convierte la Patria, esa palabra manida que sirve de escenario a las historias que no quisiéramos leer, pero allí nos vencieron y conmovieron en lo que sería un breve viaje a Tucumán para oír a Mercedes Soza en mis propios delirios… Miguel Ángel Asturias, el clásico, y Anabella Giracca, la novísima escritora, seguirán asombrando.
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He descubierto a una cuadra del hotel
una maravillosa librería Sophos
donde se puede tomar un café mientras lees un libro,
escogí por azar, este libro: Demasiados recuerdos, de Annabella Giracca,
por leer algún escritor guatemalteco y mirad lo que he encontrado:
Asturias y Giracca: pasión y rabia por Guatemala
Asturias murió cuando la niñita Giracca aún no vestía minifalda (eso creo, al oír su vehemencia en el Palacio de la Cultura para no hacer folklorismo estético con los mayas y luego leer su prosa volcánica, iniciática).
Se parecen demasiado y no es exageración. Dos prosas fulminantes, ilustradas y populares, que aman como nadie esta tierra arrasada de violencia, como niños que lloran su país y regresan a los sonidos monótonos de las letanías, como un mantra o una oración en los brazos de una abuela que es el refugio en el holocausto final: ilógico, lógico, relógico..canta e ironiza Asturias; nada te turbe, nada te espante, todo se pasa…rememora y ora la Giracca.
Dos prosas fulminantes, ilustradas y populares, que aman como nadie esta tierra arrasada de violencia, como niños que lloran su país y regresan a los sonidos monótonos de las letanías.
La historia de Anabella Giracca de manera inevitable le recuerda a un chileno La casa de los Espíritus de Isabel Allende, novela de mujeres mágicas, de destinos trágicos, con el auge y caída de los sueños redentoristas, con la maldad encarnada, con hombres que son el deseo y la muerte. Pero la Giracca se aparta del realismo mágico, hay menos metáfora, la pluma no se atrapa en lirismo, se vuelve realista, por momentos brutal, en otros lárica, casi bucólica; una narrativa esquizofrénica, que no da tregua, que nos remite a todo claroscuro, que se permite combinar en el mismo párrafo erotismo con horror, la ternura del beso de la muerte.
En otra dimensión, son novelas neo costumbristas, sin criollismo banal. Ambos quieren contarnos los buenos tiempos y hacen desfilar algunos pequeños héroes, en medio del lodazal; sacristanes decentes, indígenas indomables, artistas soberbios, colonos alemanes que se liberan en el trabajo, mujeres que crean, vagabundos con mirada prístina, cocineras del último banquete posible, artistas circenses que huyen a un nuevo mundo, generales que creen en otro orden.
Por no hay escapatoria. El texto parece un epitafio sin salida. Asturias realizó un sarcasmo atroz con los que hacen como que hacen y no hacen nada, mostró la sofisticación y profundidad de las redes de corrupción, la hipocresía, la cobardía y crueldad del abuso de poder, la rescilencia para sobrevivir en la ciudad de los patios interiores. El libro que comenzó a escribir hace casi un siglo tiene la actualidad de una profecía auto-cumplida.
Anabella Giracca nos recuerda la historia que pervive o historia del tiempo presente; un fresco que está demasiado vigente, como si pintara un mural en el cielo arrebolado de Guatemala, un martes gris, de aguacero, de esos que hemos padecidos en este Continente, donde las cabezas cortadas de cuajo conviven con la sonrisa más bella del mundo refugiada en una indígena altiva que luce su huipil colorido, como lo quisiera la Giaconda para semi cubrirse con las flores del jardín imposible del cielo.
Novelas del amor y el extravío, de la pasión por la mater dolorosa que se convierte la Patria, esa palabra manida que sirve de escenario a las historias que no quisiéramos leer, pero allí nos vencieron y conmovieron en lo que sería un breve viaje a Tucumán para oír a Mercedes Soza en mis propios delirios… Miguel Ángel Asturias, el clásico, y Anabella Giracca, la novísima escritora, seguirán asombrando.
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martes, 19 de octubre de 2010
Conversaciones de Escritores
En esta nueva cita literaria dentro de la programación del Auditorio Recoletos, la FUNDACIÓN MAPFRE ha invitado a algunos de los más destacados nombres de nuestra literatura a que, en compañía de otros escritores o críticos con quienes mantienen una especial afinidad, dialoguen sobre sus respectivas obras, sobre autores y títulos de especial importancia para ellos y sobre otros aspectos de la creación literaria en general.
Martes 19 de octubre
Enrique Vila-Matas y Marcos Giralt Torrente
Miércoles, 20 de octubre
Manuel Vicent y David Trueba
Jueves, 21 de octubre
Luis Goytisolo e Ignacio Echevarría
Martes, 26 de octubre
María Dueñas y Javier Moro
Miércoles, 27 de octubre
Bernardo Atxaga y Agustín Fernández Mallo
Jueves, 28 de octubre
Luis Mateo Díez y Manuel Longares
AUDITORIO RECOLETOS
Paseo de Recoletos, 23. 28004
Madrid
Telf.: 91 581 61 00
Todas las sesiones comienzan a las 19:30 h.
Entrada libre hasta completar aforo
lunes, 11 de octubre de 2010
Exposición sobre el olivo
El Palacio de Carvajal de Cáceres, sede del Patronato de Turismo de la Diputación Provincial, acoge desde el día 15 de octubre y hasta el próximo 25 de noviembre la exposición "Nací en el Mediterráneo: historias de un olivo".
Dicha muestra está organizada por la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural y cuenta con la colaboración de diversas instituciones públicas y privadas, así como asociaciones.
En dicha exposición se muestra la influencia de este cultivo en las culturas mediterráneas desde diversas perspectivas -histórica, religiosa, médica, farmacéutica o artística- y las propiedades de la aceituna y del aceite, así como sus usos.
Os espero a todas!
Besitos. Emma
HOMENAJE A MARIO VARGAS LLOSA
Una de nuestras normas no escritas, que no solemos cumplir es: "no repetir autor", pero hemos leído de Vargas Llosa tres maravillosos libros:
La tía Julia y el escribidor
El paraiso en la otra esquina
Las travesuras de la niña mala
¿Sería porque sus obras nos gustan?
lunes, 4 de octubre de 2010
El Tango del Condor
El Tango del Condor es el título un corto dirigido por mi hijo Juan.
Esta concursando en el Festival de Cortos de FIBABC (Festival Iberoamericano de cortometrajes ABC.
Están colgados en internet, aqui va el enlace que os lleva directamente a él:
http://fibabc.abc.es/videos/tango-condor-317.html
Esta concursando en el Festival de Cortos de FIBABC (Festival Iberoamericano de cortometrajes ABC.
Están colgados en internet, aqui va el enlace que os lleva directamente a él:
http://fibabc.abc.es/videos/tango-condor-317.html
Cuento con todas/os
viernes, 1 de octubre de 2010
Abre la exposición ´Redescubriendo Guayasamín"
En 1995 la Diputación Provincial de Cáceres y la Fundación Guayasamín abrieron en el viejo chalet de los Pedrilla, situado junto al Puente de San Francisco, una casa-museo dedicada a la obra del pintor Oswaldo Guayasamín (Quito, Ecuador, 1919-1999) con 50 piezas de arte precolombino y una treintena contemporáneas.
Ahora, 15 años después, la obra de Guayasamín crece en el interior de aquel antiguo molino que quedó convertido en una sala de exposiciones con taller-estudio incluido. La Fundación, que ahora dirige el nieto del artista, ha traído hasta Cáceres 11 piezas nuevas. La muestra, titulada 'Redescubriendo Guayasamín', se inauguró ayer en los jardines que el museo comparte con la Casa Pedrilla. Fue a las ocho y media de la tarde, tres horas después de que los cacereños se llevaran la gran decepción de la jornada: Cáceres no está entre las seis ciudades candidatas que aspiran a ser capital europea de la cultura en el 2016.
Las 11 piezas que ha acercado la Fundación hasta Cáceres corresponden a las dos primeras grandes series pictóricas del autor iberoamericano. Hay tres cuadros que pertenecen a 'Huacayñan', que en quichua quiere decir 'El camino del llanto'. Y los ocho lienzos restantes forman parte de la etapa denominada 'La Edad de la Ira'. «Las obras de su primera etapa muestran el llanto de los indios, los negros y los mestizos de nuestra América. Y 'La Edad de la Ira' refleja toda la violencia desatada por el ser humano, que produjo las dos guerras mundiales, la Guerra Civil española y las dictaduras crueles de Iberoamérica». Así habla el ex presidente de Ecuador Rodrigo Borja Ceballos de la obra del que fuera su amigo personal. Ayer no se quiso perderse el acto y también estuvo en los jardines Pedrilla-Guayasamín.
La exposición que atesora el museo cacereño es única en Europa. Está concebida, de hecho, como puente de unión entre España y América Latina. En ninguna otra ciudad del continente existe una muestra tan vasta como la que hay aquí. «Es nuestra extensión hacia Europa», reconoce Pablo Guayasamín, el nieto del artista. Sí hay, en cambio, colecciones similares en Chile, Cuba, Puerto Rico y República Dominicana.
Las nuevas piezas de Guayasamín permanecerán en Cáceres durante, al menos, cinco años. Se suman a las que llegaron en el año 1995 con el objetivo de ofrecer al visitante una visión completa de la trayectoria del autor. «Van a permitir hacer una lectura transversal», señala Pablo Guayasamín. Además de 'Huacayñan' y 'La Edad de la Ira', existe una tercera etapa en la vida del autor. Se la conoce como 'La Edad de la Ternura' e integra las piezas que Guayasamín dedica a su madre y las madres del mundo. La Fundación no ha incorporado nuevas obras de esta etapa al considerar que los fondos cacereños ya eran suficientes.
La obra de Guayasamín dará en breve otro estirón en la ciudad. Según anunció ayer el presidente de la Diputación, Juan Andrés Tovar, la institución provincial y la Fundación Guayasamín han firmado un convenio que posibilitará la llegada de otros 60 cuadros del autor iberoamericano, que viajarán por diferentes puntos de la región. Además, el convenio permitirá que artistas de la provincia de Cáceres puedan mostrar sus creaciones en Ecuador.
¡OS ANIMO A IR!.
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